La vida religiosa de la comunidad judía de Monastir

En todo el mundo judío, Monastir era conocida por sus rabinos, jueces (dayanim) y sabios (jajamim), de los que mencionaremos algunos.

En los años veinte del siglo XVI llegó a Monastir un inmigrante portugués, Diogo Pires, conocido en hebreo como Shlomó Moljo. Escribió un libro titulado Sefer ha-Mefoar (El libro esplendoroso) en el que aparecen sermones mesiánicos y la «profecía» de que 1540 sería el año de la redención y el fin de los días. Más tarde, Shlomó Moljo se plegó ante falso mesías David Reuveni, hasta que finalmente ambos cayeron víctimas de la Inquisición española.

Entre los rabinos famosos que ejercieron en Monastir se encuentra Rabí Shlomó Ben Abraham Ha-Cohen, conocido por el acrónimo Maharashakh (c. 1520-1602). Al llegar a la ciudad, ya era versado en la ley judía, y mucha de su responsa trata de los habitantes hebreos de aquella.

También ejercieron como rabinos Rabí Yosef Arueti y rabí David Luca (que falleció en 1577).

En los años ochenta del siglo XVI, Rabí Benjamín Gascón desempeñó el cargo de dayan, emitió numerosos decretos, entre ellos la prohibición a los judíos de la ciudad y de Belgrado de comerciar durante las festividades judías.

En 1643 presidió el Rabí Abraham Falcón.

En los años treina del siglo XVIII es mencionado como rabino de la ciudad, Rabí Benjamín Medina y en 1794 es recordado como tal, Rabí David de Buton.

En los años treina del siglo XIX se menciona a los rabinos Dan «Merkado» Kamhi y Abraham Peso.

La figura de Rabí Abraham Guer Tzedek fue la más colorida: nacido en 1800 en el seno de una familia cristiana griega ortodoxa devota, fue enviado en 1815 al seminario teológico de Esmirna. El barco en el que viajaba naufragó, pero él se salvó milagrosamente. Al regresar a Salónica sintió una gran atracción por el judaísmo y comenzó a buscar caminos para su conversión. Pretendió ser descendiente de una familia de judíos romaniotes de una isla griega, pero como no hablaba ladino (djudeo-espanyol) el engaño fue rápidamente descubierto. Después de que su solicitud de abandonar la iglesia ortodoxa griega le fuese denegada por el patriarca, se dirigió al pueblo de Duyaren donde se convirtió formalmente al judaísmo y fue circuncidado. Después de casarse se mudó a Monastir, donde ejerció un tiempo como dayan (juez rabínico) y rápidamente fue nombrado rabino principal de la comunidad. Pasó la mayor parte de su vida en dicha posición. A los 70 años regresó a Salónica y allí falleció.