Felix Nussbaum. "El refugiado, 1939"

El refugiado, 1939

Un hombre se desploma sobre su silla, con el rostro entre sus manos en un gesto de desesperación total. Cerca, un bastón y un atillo. Una mesa larga y vacía a excepción de un globo terráqueo domina el cuarto, que recuerda una celda de prisión. A través de la puerta se ven árboles desnudos, y una bandada de cuervos sobrevuela al acecho.

Esta pintura es una reflexión sobre el miedo y la desesperación de Nussbaum en vísperas de la Segunda Guerra Mundial. A medida que la sombra ominosa de Alemania cubría toda Europa, el artista perdía toda vía de escape. La desolación en el cuarto significa la desesperanza, mientras que la deprimente vista a lo lejos refleja la cruda realidad: no hay refugio para el judío.

Felix Nussbaum

El refugiado, 1939

Óleo sobre lienzo
61 x 76 cm